¿Cómo evitar que tu móvil se sobrecaliente? La USC tiene la solución

Investigadores del Ciqus apuestan por controlar el flujo de calor de materiales de dispositivos electrónicos aplicando un voltaje 

Los investigadores del Ciqus Rafael Ramos (de pié), Víctor Álvarez (a la izquierda) y Víctor Leborán

Los investigadores del Ciqus Rafael Ramos (de pié), Víctor Álvarez (a la izquierda) y Víctor Leborán / Ciqus

Uno de los problemas más habituales de los teléfonos móviles o los ordenadores, entre otros dispositivos electrónicos, es el sobrecalentamiento que se puede producir, lo que impide que haya avances de última generación en la tecnología de microchips. “El sobrecalentamiento en los dispositivos electrónicos se da por el paso de corriente y en ese momento el material tiene una resistencia”, explica en detalle a EL CORREO GALLEGO Rafael Ramos, físico e investigador del Ciqus que, junto a Francisco Rivadulla, ha dirigido un estudio del grupo de Química y Materiales Moleculares que abre nuevas posibilidades para el diseño de reguladores térmicos y para el desarrollo de tecnologías más eficientes y sostenibles. Ramos detalla que “el calentamiento es proporcional tanto a la corriente que pasa como a la resistencia y cuanta más corriente circula más calor genera”.

Junto a Víctor Álvarez, doctorado del Ciqus y primer autor del estudio, y el investigador Víctor Leborán, los citados investigadores apreciaron que cambiando la estructura del material se puede modificar la resistencia al calor. Esto se hace aplicando un pequeño voltaje. “Al cambiar la resistencia eléctrica se produce una pequeña variación de la estructura del material, ya que son óxidos con una resistencia térmica muy sensible a la concentración del oxígeno”, detalló Ramos.

El investigador incide en que con voltajes “mucho más pequeños” se consigue regular la resistencia del material. “Con 3 voltios positivos tiene una resistencia y si le aplicas menos voltaje de polaridad opuesta, negativo, la resistencia ya es otra”, dice. Lo ejemplifica con el hecho de conectar una pila por un polo u otro.

“Con la disipación de calor los dispositivos tendrían menos fallos, aumentaría su rendimiento y se incrementaría su vida útil”

Rafael Ramos

— Físico e investigador del Ciqus

Rafael Ramos destaca que en la actualidad no existen muchas tecnologías que atajen estos problemas “porque el calor se propaga por cualquier medio y es muy difícil de regularlo”.

Hasta el momento han demostrado que “podemos controlar el flujo de calor de manera reversible en cambios pequeños, del 20% (entre el estado de alta y baja resistencia)”. 

El propósito final es que estos dispositivos se enfríen más o que el calor vaya a otros sitios que “no afecten tanto”. Se trata de conseguir regular lo que se llama disipación de calor. “De esta manera habría menos fallos en los dispositivos, aumentaría el rendimiento e incluso podría incrementar su vida útil”, concluye.