Los concellos se quedan sin niños: los menores de cuatro años merman en siete de cada diez

Un tercio de los municipios tiene censados menos de una treintena de infantes de esta edad

En el Eje Atlántico la situación es mejor que en las provincias de Lugo y Ourense

Dos niñas de camino al colegio

Dos niñas de camino al colegio / Casteleiro

Que Galicia tiene un problema demográfico no es sorpresa para nadie. La peor parte se la llevan las localidades del rural, donde cada vez son menos los niños que juegan en la calle e inundan el espacio público. Siete de cada diez concellos han perdido población de entre cero y cuatro años desde 2021, una cifra preocupante que parece no tener freno, sobre todo, en el interior.

La población infantil mengua, en buena parte, debido a la caída de la natalidad en la última década. El año pasado la comunidad tan solo registró el nacimiento de 39 bebés al día, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que tuvo como consecuencia el valor más bajo de la serie histórica, con 14.103 nacimientos al cierre del pasado año. Ejemplo de esto es también que en veintiséis municipios de la comunidad no se ha registrado ningún alumbramiento en los últimos tres años.  

Son numerosos los concellos en los que han visto más muertes que partos en los años más recientes, a pesar de que esto no se traduce en un descenso de la población, que, con pequeñas variaciones, se encuentra alrededor de los 2,7 millones de habitantes desde hace medio siglo, gracias a la llegada de inmigrantes. Galicia contaba al cierre del pasado año con 79.893 niños y niñas de entre cero y cuatro años.

Mientras sigamos con esa media-en torno a los 20 niños en esta franja de edad-, podemos aplaudir con las orejas. Hay concellos más grandes y más cerca de la ciudad con peores números”, indica Amable Fernández, alcalde de Manzaneda, uno de los 105 municipios de los 313 que componen la comunidad donde los menores de esta franja de edad han crecido o se han mantenido igual en los últimos dos años.

Entre ellos están Santa Comba, Arzúa, Monterroso, Celanova, Ribadumia o Mondariz. En casi ninguno de ellos este aumento ha sido drástico. Entre los que más infantes de hasta cuatro años han sumado están Forcarei, donde han pasado de 34 a 58, y Mazaricos, que ha subido de 80 a 93.

Niños a la entrada de un centro educativo cercano a Santiago

Niños a la entrada de un centro educativo cercano a Santiago / Antonio Hernández

Los más preocupantes

Esta situación demográfica es especialmente preocupante en un centenar de concellos, es decir, casi el 30% del total, que no alcanzan ni siquiera la treintena de niños y niñas censados en esta franja de edad. Con todo, esto no se da de igual manera en toda la geografía gallega. Las provincias del Eje Atlántico se llevan la mejor parte: en Pontevedra tan solo dos municipios -Dozón y Mondariz-Balneario- cuentan con tan pocos menores de cuatro años, una cifra que aumenta hasta la decena en el caso de la de A Coruña -Boimorto, A Capela, Cerdido, Mañón, Moeche, Santiso, As Somozas, Toques, Vilasantar e Vilarmaior -.

En el lado contrario de la balanza está Lugo, que roza las 30 localidades con un bajo número de pequeños. Aunque la más afectada, con una notable diferencia, es la provincia de Ourense, ya que 62 de sus 92 municipios se encuentran en esta situación.

“Estamos dando una ayuda desde que nacen hasta los cuatro años de 800 euros anuales por niño”, explica Fernández, regidor de Manzaneda, acerca de las medidas que llevan a cabo para que no se reduzca la población. Aunque resalta que en el rural “tendemos a ir a menos”: “Que esta situación sea reversible es muy difícil”.