Entrevista | Ian Gibson Hispanista

Ian Gibson: “He tenido que tomar ansiolíticos, escribir este libro me ha removido por dentro”

{Dublín, 1939}Ian Gibson llega a Santiago en tren. “He venido leyendo los seis poemas gallegos de Lorca”, dice. Premiado hispanista, habla a 300 metros de donde La Barraca representó una obra lorquiana en 1932 durante un viaje del poeta granadino por Galicia. Dublinés “orgulloso”, presenta ‘Un carmen en Granada’, libro donde cuenta que el autor de Fuente Vaqueros le salvó a los 18 años “de la desesperación, tal vez, del suicidio”, añade.

Ian Gibson en el hotel Virxe da Cerca (Santiago). / ANTONIO HERNÁNDEZ

Ian Gibson en el hotel Virxe da Cerca (Santiago). / ANTONIO HERNÁNDEZ / XABIER SANMARTÍN

Ian Gibson es un encanto en el trato cercano, mezcla educación y calidez, naturalidad y entusiasmo, feliz de hablar en una tierra que Lorca visitó varias veces. Apunta que, “con el cambio climático” no descarta venirse “a Galicia” por mucho que ame su Granada. Y añade: “Volveré a galicia en verano, seguro”.

Ian igual charla sobre pesca con el fotógrafo de este diario, Antonio Hernández (“Un gran tipo, quiere enseñarme a pescar”, dice) que explica al redactor su sorpresa al descubrir hace días nuevos modismos basados en la palabra “pedo”.

Nacido en Dublín el 21 de abril de 1939, visitó ayer la Feria del Libro de Santiago dentro del espacio Un café Candelas con... Autor de biografías sobre iconos culturales como Antonio Machado, Federico García Lorca o Salvador Dalí, presenta Un carmen en Granada (Tusquets), libro donde la palabra “España” aparece ya en la línea 14. No es casual.

Es ciudadano español desde 1984.

A usted le debemos mucho en cuanto a difusión de creadores como Lorca, Buñuel, Dalí, Machado...

Soy irlandés, me siento muy a gusto aquí. Soy comunicativo, soy didáctico. No quería ser profesor de universidad porque me producía asco el sistema de exámenes que había cuando era joven, y quería ser didáctico a mi manera, ser escritor y enseñar algo en un libro o sugerir algo, apuntar algo sobre España que tal vez otros no hubieran visto, ¡lo que fuera! Yo reconozco cuando hablo con todo el mundo que estoy un poco en plan predicador, con el deseo de querer transmitir un convencimiento, y eso no lo puedo cambiar. Es algo que viene de mi infancia, y de eso va mi libro.

Soy de una familia protestante muy puritana. Yo creía que iba a ser pastor protestante y cuando lo dejé seguí siendo un poco predicador en el sentido de estar obsesionado con la búsqueda de la verdad y los evangelios... Ser protestante en Dublín era pertenecer a una minoría pequeñísima, así que ni me sentía inglés, ni irlandés. Estaba rodeado de gente que no me aceptaba como irlandés porque era protestante, y eso me creo muchos problemas que he ido superando gracias a la literatura y a mi vocación.

¿Llegó a valorar que otra persona contase su vida, fuera por voluntad propia o propuesta ajena?

No, nunca valoré esa posibilidad y tampoco recibí propuestas. ¿Quién soy yo para que hagan una biografía? Tal vez escribí esta biografía para evitar que otros lo hiciesen, como tal vez fuera el caso de Dalí u otras personas que hicieron su autobiografía, quizá, para impedir que otros hiciesen una biografía más verídica, creando así su propia biografía. Ese no es mi caso. Yo no he mentido en mi libro. He querido explicar de dónde vengo, por qué soy biógrafo de Lorca, Machado, Dalí, Buñuel, como llegué a eso desde mi infancia protestante, cuando no sabía nada de nada de España. Todo se lo debo a Lorca, a mi descubrimiento increíble, incrédulo de Lorca a los 18 años sin apenas saber castellano. Fue un milagro, él me salvo la vida, me salvó de la desesperación, tal vez, del suicidio, porque me dio una vocación: investigar su vida, su fusilamiento, su asesinato y su obra. Y te juro que no estoy mintiendo. Esa es la verdad.

¿Le ha dolido escribirlo?

(Ian, por primera vez en media hora de encuentro, calla un rato) Me ha dolido mucho más de lo que yo hubiera querido. Me ha creado pesadillas

hasta un punto casi intolerable. He tenido que tomar ansiolíticos porque escribir esto ha removido lo que tenía por dentro, quizá pueda ser catártico, un proceso de liberación de todo eso. Lo cual es fantástico a los 84 años. Es algo extraordinario. Estoy sufriendo, no lo oculto, pero tras cada pesadilla me levanto con fuerzas cada día, con la sensación de que estoy empezando una nueva etapa creativa, será la última pero es nueva y ya tengo proyectos para próximos libros.

¿Qué destaca del nexo entre Lorca y Galicia?

Lorca es un músico nato. Es un genio, claro, y tiene muchos dones, uno de ellos, la música. Nace casi tocando el piano, algo increíble, y en Galicia descubre música que le gusta y luego en sus recitales toca muchas canciones gallegas. Tiene también muchos amigos gallegos en Madrid, como Ernesto Guerra da Cal, y luego conoce a Blanco Amor. De modo que... sí, Galicia es importantísima para Lorca.