Fallece Dictino Maceira, exjefe de área de Caixa Galicia y ecónomo del Arzobispado de Santiago

Dictino Maceira Fernández, quien fue director del área de Santiago de Caixa Galicia, ha fallecido esta madrugada tras luchar contra una larga enfermedad. Nacido en Vedra (A Coruña) en 1943, Maceira ocupó puestos de liderazgo en el sector financiero, trabajó para mejorar el tejido empresarial de la capital de Galicia y fue fundador, directivo y entrenador del CD San Mamed, uno de los clubes que más títulos ha ganado de la Copa do Sar. Tras jubilarse , también ejerció como ecónomo del Arzobispado de Santiago. Será enterrado este viernes en la intimidad familiar. El sábado se celebrará el funeral a las 17:00 en la iglesia de San Francisco. No se admitirán flores ni para el entierro ni para el funeral.

Una constante evolución hacia la excelencia

La historia de Dictino Maceira demuestra una constante evolución hacia altos parámetros de excelencia humana y profesional. Nacido en Vedra en 1943, se trasladó diez años después a Santiago, donde se hospedó en una pensión y cursó los estudios de Bachillerato elemental en la academia Menéndez Pelayo. A los 15 años, pasó al Instituto Masculino (el Xelmírez, ubicado antiguamente en la compostelana plaza de Mazarelos), donde contó con relevantes compañeros de promoción como José Antonio Orza, José Luis Torres Colomer o del doctor José Carro Otero. Tras este periplo accedió a la Universidad, donde comenzó la carrera de Ciencias Químicas. Un par de años fueron suficientes para que Maceira se diera cuenta de que no era su verdadera vocación y la abandonara.

En el año 1961 comenzó a trabajar en una industria maderera, una actividad que alternaba con los estudios de Comercio. En aquellos tiempos no existía Facultad de Ciencias Económicas en la capital de Galicia. Entre 1964 y 1965 cumplió el servicio militar y la coincidencia con el Año Santo Xacobeo llevó a Dictino Maceira a desfilar con su regimiento por las calles de Compostela.

1967: el año clave en su vida

Sin duda, 1967 fue un año clave en su vida. Además de contraer matrimonio, aprobó las oposiciones a la Caja de Ahorros de Santiago, donde comenzó a trabajar como auxiliar administrativo. Con sólo 24 años fue seleccionado como responsable del proyecto de Informática de la caja, una innovación que en 1968 daba sus primeros pasos. Esto demuestra la vocación de Maceira por complementar su formación, junto con la de sus colaboradores, para adaptarse a los requisitos de los nuevos tiempos.

Tres años después, se convertía en el secretario del director general de la caja compostelana Juan José Hernández, a quien Maceira considera su modelo y mentor. Por aquel entonces tenía 30 años y, mientras su carrera experimentaba un ascenso imparable, encontró tiempo para tener y educar a sus tres hijas y un hijo.

Otro salto cualitativo en lo profesional llegó tras su paso, en 1975, por el Máster para directivos de la Confederación de Cajas de Ahorros. En él invirtió 18 meses de su vida, que resultaron muy rentables, dado que en 1976, con 33 años, se convertía en subdirector general de la entidad financiera compostelana. También entraba a formar parte del consejo de administración como vocal de los empleados, convirtiéndose en el secretario de este órgano de gobierno.

Los cuatro años que transcurren entre 1976 y 1980 fueron algunos de los más duros, y a la vez irrepetibles, para Maceira. Corresponden al periodo en el que se estudiaba la fusión de Caixa Galicia con la caja de Santiago. Se iba a tomar una decisión irreversible, que fue analizada con lupa bajo la idea motriz de que contribuyese al avance de Galicia. Más de dos décadas después de sellar esta unión, Caixa Galicia se sitúa como la cuarta mayor caja de España.

Con este gran nacimiento, Maceira ascendió y ocupó el cargo de director del área de Santiago. Mientras, se daba forma a la cultura financiera de la entidad, fruto de un proceso de aportaciones de todas las cajas que componían Caixa Galicia, sin imposiciones. En 1983 también se hizo cargo de la dirección territorial de A Coruña, aunque tres años después volvió a centrase únicamente en la zona de Compostela.

Los valores esenciales del deporte de equipo

El interés de Maceira por la dinamización económica del área de Compostela no se limitó a las finanzas. Así, también se encontraba entre sus anhelos mejorar el tejido empresarial, lo que le llevó a pertenecer, durante tres legislaturas, a la Cámara de Comercio de Santiago, donde empezó como vocal a propuesta de la Federación de Empresarios de Galicia.

Maceira también creía firmemente en que el deporte de equipo potencia valores esenciales. De ello surgió su fascinación por quienes lo practican en la base, los no profesionales. Llegó a ser delegado de la Federación Gallega de Fútbol en Santiago, aunque, si retrocedemos a 1967, año del nacimiento del Club Deportivo San Mamed, en Vedra, lo hallamos en su plantel. Fue fundador, directivo y entrenador del club, que se situó entre uno de los que más títulos cosechó de la Copa do Sar.

En agosto 2003, las redacciones de EL CORREO GALLEGO, Galicia Hoxe y la antigua emisora Radio Obradoiro decidieron por unanimidad otorgar el galardón de Gallego del Mes de Agosto a Dictino Maceira.