las opiniones de los asistentes

Entre la calentura de Maluma y la dulzura de Vetusta Morla, fin del O Son do Camiño

El cantante colombiano de regueton desató gigantescos coros en el Monte do Gozo en el arranque europeo de la gira ‘Don Juan’, cuyo logotipo es un perro robotizado que muerde un tanga rosado

Y el grupo madrileño de indie pop rock brilló ayer tocando como en casa, porque su público en Galicia así lo quiere

Si una gira se llama “Don Juan” Tour y trae un single cuya portada muestra al protagonista desnudo, sujetando bajo su ombligo un cóctel servido dentro de un coco, es que te visita Maluma. A Juan Luis Londoño Arias, Maluma, se le han rendido las casi 40.000 personas a su paso por el festival O Son do Camiño. Llegado a Santiago para abrir su tour europeo, este icono del reggaeton ha paseado sus 29 años (aparenta más) por el escenario del Monte do Gozo, con temas como “Colo Loco”, cantadas en gigantesco coro con un target de edad abierto cual abanico, con público menos joven que el de Eladio Carrión (estadounidense con vena puertorriqueña, de 28 primaveras) o Mora (puertorriqueño; 27 abriles), por citar otros reclamos del menú latino de este festi.

Maluma en un momento de su actuación este viernes en O Son do Camiño 2023

Maluma en un momento de su actuación este viernes en O Son do Camiño 2023 / Álvaro Ballesteros (EP)

“¿Dónde están las señoritas solteras de Santiago?”, preguntó un Maluma y el grito resonó en Noia. El colombiano salió a la arena de la noche arropado por una pequeña banda, más un vocalista-animador de apoyo a ratos (ejerció de animador a mitad del show para dar tregua al rey y gas al público) y cinco bailarinas con una coreografía dinámica, pulida al detalle, con sus previsibles momentos de sensual adoración al cantante. Él, barbado con “b” de bronceado y de unas bermudas vaqueras moradas, a juego con una cazadora inicial que le duró poco, mostró solvencia sobrada, cercanía, palique, cariño y letras de amor, aventura, encuentros, deseo, motivando al público con juegos de manos, gritos, móviles arriba cual cielo estrellado, en movimiento eso sí, porque Maluma se mueve y mueve a millones de personas (más de 29 suscritos a su canal de Youtube).

Maluma durante su actuación en O Son do Camiño

Maluma durante su actuación en O Son do Camiño / Álvaro Ballesteros (EP)

Dio las gracias, se quitó la ‘chupa’, se quedó en casual camiseta básica negra sin mangas, sudó, bebió, brindó, invitó “a tomar” (en ese momento debió sonreír toda la directiva de Estrella Galicia, copatrocinadora del evento), algo que él hizo en un vaso transparente sin que sepamos si era agua o no pero que Coco Loco (vodka, tequila y ron blanco) no parecía, y según subía la temperatura en escena, Maluma perdía ropa, no tanta como algunas fans pedían, y se entraba en una recta final donde resonó su famoso “Felices los 4” o “Cuatro Babys”, parte de un repertorio donde la palabra “mamasita” suena o se sugiere cada minuto, con un estilo que irradia optimismo en canciones como “Carnaval” (”La vida es una y es un carnaval; lo malo se irá todo pasará”. Todo ello en un show con abundantes chorrros de humo, coros mil, vaiven de caderas, manos arriba, abajo, generando un ambiente junto al público cercano al de los conciertos de grandes orquestas gallegas como Panorama, Olympus o París de Noia, sí, como suena, solo que ellos no te regalan un selfie donde pones tu rostro delante del pecho de Maluma a tamaño galáctico en las macropantallas de vídeo.

Sábado, 17 de xuño, en O Son do Camiño 2023

Sábado, 17 de xuño, en O Son do Camiño 2023

Tras el pasó de Maluma y esa gira que tiene por bandera un perro doberman robotizado que muerde un tanga rosado, ya ayer, tocaron dos buenos grupos como Kaiser Chiefs (indie rock old school) y Royal Blood (poderoso dúo hard rock que desató pogos al tocar “Little Monster”) en un recinto con miles y miles de personas que no les atendían porque Vetusta Morla, Aitana y Duki, eran el tesoro más deseado de esa noche perlada.

Público de O Son do Camiño 2023 durante la actuación de Vetusta Morla en O Monte do Gozo

Público de O Son do Camiño 2023 durante la actuación de Vetusta Morla en O Monte do Gozo / Álvaro Ballesteros

Vetusta Morla triunfaron tocando indie pop rock como en casa, porque su público en Galicia, así lo quiere. Tras un inicio contenido, la banda que lidera Pucho a la voz fue pillando vuelo con “No seré yo”, “La mosca en tu pared”, y fue al cantar “Maldita dulzura”, el público despertó más el corazón para ajustar su sintonía. Y esa comunión festiva, emotiva, nocturna, creció al sonar “Copenhague”, temazo de “Un día en el mundo”, álbum que cumple 15 años y al que Vetusta Morla le deben la vida y sus fans... la escalera al cielo. Fin.