DÍA DE TODOS LOS SANTOS

Santiago recuerda a sus seres queridos

Como marca la tradición, la gran afluencia de familias en el cementerio de Boisaca fue constante

"Es una festividad muy bonita por su significado: reencontrarse con aquellas personas que ya no están con nosotros", dice la compostelana Ana María Antúnez

“Es una jornada muy emotiva, de recuerdo a los seres queridos que ya no están con nosotros. Además, los cementerios se llenan de flores y ya los días previos se prepara con especial mimo las sepulturas”, opina Consuelo Fernández

Compostelanos en el cementerio de Boisaca durante el Día de Todos los Santos

Compostelanos en el cementerio de Boisaca durante el Día de Todos los Santos / Jesús Prieto

El Día de Todos los Santos llenó de flores, como marca la tradición, los cementerios de Santiago. En Boisaca, la gran afluencia de compostelanos fue constante durante toda la jornada del 1 de noviembre, si bien, fue a lo largo de la mañana cuando se registraron los picos de mayor actividad, tal y como recomendaron desde el Concello ante la llegada, por la tarde, de un nuevo temporal.

No obstante, poco después de las 13.00 horas el viento ya se dejó notar con fuerza en el camposanto municipal, donde el continuo movimiento de vehículos, tanto de entrada como de salida, anticipaba la presencia de numerosas familias para reencontrarse con sus seres queridos ya fallecidos. “Es un día muy bonito por su significado: recordar a todas aquellas personas que ya no están con nosotros, aunque de algún modo siempre nos acompañan y siempre están ahí”, afirma Ana María Antúnez, quien normalmente, coincidiendo con la celebración del Día de Todos los Santos, se decanta por las mañanas para acudir a Boisaca.

“Es una festividad muy especial, puesto que es una jornada muy emotiva, de recuerdo a los seres queridos que ya no están con nosotros. Además, los cementerios se llenan de flores y ya los días previos se prepara con especial mimo las sepulturas”, sostiene Consuelo Fernández, quien entra en Boisaca junto a un familiar, en una imagen que se repite casi sin descanso.

Compostelanos en el cementerio de Boisaca durante el Día de Todos los Santos

Compostelanos en el cementerio de Boisaca durante el Día de Todos los Santos / Jesús Prieto

Asimismo, en las floristerías ubicadas en las inmediaciones del cementerio, que estos días encaran su agosto particular, el personal se multiplica para responder a todos los pedidos. “Hemos estado trabajando casi sin parar durante toda la mañana, lo cual significa que está siendo una jornada de gran afluencia de compostelanos que cumplen con la tradición del Día de Todos los Santos. Además, ya en los días previos, desde el pasado fin de semana, la carga de trabajo ha ido aumentando de forma notable”, afirman la responsable de una floristería de Boisaca, al tiempo que subraya que ha notado un incremento de visitantes con respecto al 1 de noviembre del año pasado.

No obstante, pese al goteo constante de vehículos durante la mañana en las inmediaciones del cementerio, no se registraron atascos en los accesos. En este sentido, para facilitar el uso de transporte público y evitar retenciones, Tussa, la sociedad municipal para la gestión del transporte, reforzó la línea 1 de la red de autobuses urbano, que el día 1 de noviembre, entre las 9.00 y las 20.00 horas, contó con una frecuencia de paso de 16 minutos. En el resto de horarios, la cadencia fue la habitual de un domingo o festivo (cada 30 minutos).

Compostelanos en el cementerio de Boisaca durante el Día de Todos los Santos

Compostelanos en el cementerio de Boisaca durante el Día de Todos los Santos / Jesús Prieto

También en la jornada de este miércoles, el arzobispo de Santiago, monseñor Francisco José Prieto Fernández, presidió en la Catedral la solemnidad de Todos los Santos, que inició con la tradicional procesión capitular y funcionamiento del Botafumeiro. Ya este jueves, 2 de noviembre, a partir de las 9.30 horas, se celebra en la basílica compostelana la misa capitular por la conmemoración de Todos los Fieles Difuntos, a la que seguirá la tradicional procesión claustral con el rezo de responsos.