Los bolardos ‘smart’ del casco histórico siguen sin funcionar casi dos años después de su colocación

Se instalaron en febrero de 2022, pero nunca han estado operativos porque el sistema no es compatible con el software general de la Policía Local

La previsión del gobierno local es que estén activos antes de que acabe 2023

En la imagen, el nuevo dispositivo de control de acceso al casco histórico ubicado en la zona de Porta Faxeira

En la imagen, el nuevo dispositivo de control de acceso al casco histórico ubicado en la zona de Porta Faxeira / ANTONIO HERNÁNDEZ

Os novos bolardos instaláronse en febreiro de 2022, e nunca foron operativos porque o sistema non é compatible co software xeral da Policía Local”. Así explican desde el Concello de Santiago la eterna demora que acumula la puesta en marcha del nuevo sistema de control de acceso al casco histórico, que incluye cámaras inteligentes y reductores de velocidad con pesaje con los que pretende mejorar la movilidad en la zona monumental. “Non están conectados coas bases de datos nas que figuran, por exemplo, as tarxetas de residentes e os permisos de paso e parada. Por ese motivo, os bolardos están sempre baixados”, indican desde el grupo municipal de Compostela Aberta, que ha asumido en la composición del actual gobierno local las cuestiones relacionadas con el área de movilidad.

Para desbloquear esta situación, que se remonta ya a hace casi dos años, desde Raxoi inciden que “neste mandato contratouse a subministración do conector multiplataforma que permitirá que ambos sistemas sexan compatibles”, y confían en que “os bolardos empecen a funcionar correctamente antes de que remate o ano”.

Todo ello después de una sucesión de plazos incumplidos, puesto que el anterior gobierno local apuntaba ya a las navidades de 2022 como el periodo definitivo en el que se activaría el nuevo centro de movilidad inteligente diseñado para la capital gallega en el marco del proyecto de Compra Pública Innovadora (CPI) Smartiago, la hoja de ruta para transformar la capital gallega en una smart city.

La puesta en marcha de este nuevo centro contempla la incorporación de un “hardware e software de post procesamento, cun sistema de intelixencia artificial baseado en algoritmos de deep learning”. Permitirá “predecir as rutas de tráfico de mercadorías, e as de vehículos. E tamén incidirá na integración do control de tráfico, con paneis de mensaxes e ocupacións de aparcamentos”, tal y como recoge el proyecto Smartiago. En cuanto a los reductores de velocidad que también se han instalado en el casco histórico, permiten “a pesaxe de vehículos en marcha cunha fiabilidade do 80 % e, polo tanto, a detección de vehículos con sobrepeso, e o contraste dos pesos entre vehículos”. También se instalaron nuevos sistemas de control de acceso y equipos con cámaras de reconocimiento de matrícula para todo el ámbito de la ciudad histórica.

“O proceso dos datos obtenidos, tanto internos (con detectores, cámaras, parquímetros, reguladores de tráfico), así como os externos (as bases de datos aportadas por Concello, Xunta, DXT, etc. ), procésanse a través de algoritmos que permitirán realizar distintas análises desa información (descriptica, predictiva, etc.) e anticipar solucións aos problemas de mobilidade, entre elas o cálculo e uso de perfís de tráfico; a predicción e detección de incidentes e a planificación de rutas”, comunicaron desde el Concello durante la presentación de un plan cuyo objetivo principal es la puesta en marcha de la hoja de ruta formada por un conjunto de soluciones tecnológicas innovadoras en el ámbito de las ciudades inteligentes, encaminadas a convertir Santiago en la primera iniciativa que busca eficiencia, máxima aplicabilidad y adaptación de la I+D a las problemáticas de las Ciudades Patrimonio en su conjunto.

Ciudades Patrimonio

A través de esta iniciativa buscan que los resultados sean altamente escalables, eficientes y replicables en otras ciudades o entornos en los que el Patrimonio Histórico sea un atributo distintivo de las mismas.

Igualmente, el nuevo sistema de cámaras inteligentes que se ha diseñado permitirá, entre otros aspectos, la detección y lectura de la matrícula de vehículos; su clasificación, la lectura de placas indicadoras de tara y volumen; detección de remolques y semi-remolques; la detección y clasificación de mercancías descargadas en la vía pública, o la detección y seguimiento de un vehículo a través de todas las cámaras de visión artificial desplegadas. Todo ello con el objetivo de “reducir de forma drástica os desprazamentos con vehículos contaminantes na cidade histórica e previr os danos en pavimentos por acceso indebido de vehículos de tonelaxe excesiva”.

A lo largo de los últimos meses también se instalaron nuevas cámaras, la mayoría de ellas en intramuros, pero también en otros puntos estratégicos en el sistema vial de Santiago, como el Hórreo, A Senra, San Pedro, Xoán XXIII, As Rodas, San Roque o praza de Galicia.

El proyecto Smartiago cuenta con un presupuesto de 6.180.000 €, que se financian en un 80% (4.944.000 €) por Fondos Europeos de Desarrollo Regional (Feder).