Entra en vigor la ley para gestionar el Panteón de Galegas e Galegos Ilustres a través de una fundación pública

Entre los objetivos está que desempeñe un papel vivo y activo como lugar de encuentro y aprendizaje en la comunidad

Visitantes en la entrada del Panteón de Galegos Ilustre

Visitantes en la entrada del Panteón de Galegos Ilustre / Jesús Prieto

La nueva ley del Panteón de Galegas e Galegos Ilustres, aprobada por unanimidad entre los tres grupos con representación en el Parlamento autonómico a finales del pasado mes de julio, entrará en vigor hoy, un día después de su publicación en el Diario Oficial de Galicia (DOG).

De esta forma, tanto la capilla de la Visitación, lugar en el que se encuentra el mausoleo, como el conjunto de la Iglesia de San Domingos de Bonaval, volverán la gestión pública y laica a través de una Fundación dependiente de la Cámara gallega. Además, se identificará como símbolo de Galicia.

Con la luz verde en el boletín gallego, el Panteón sale del limbo jurídico en el que se encontraba actualmente. Es ahora cuando el Parlamento autonómico debe procurar la cesión a la citada fundación por parte de la Archidiócesis de Santiago de Compostela del uso de la iglesia de San Domingos de Bonaval, y de la parte del terreno público municipal imprescindible por parte del Concello de Santiago, en ambos casos “por el máximo tiempo posible”.

Así las cosas, una vez se constituya la Fundación do Panteón de Galegas e Galegos Ilustres, la Presidencia de la Cámara gallega deberá de promover la formalización de un convenio de colaboración con la Consellería de Cultura para que los servicios del Museo do Pobo Galego asuman la gestión del espacio físico del panteón, junto con la “adecuada compensación financiera por los gastos adicionales en que incurra”.

La exposición de motivos de la ley también indica que el acuerdo tiene como objetivo que el Panteón desempeñe un papel vivo y activo como lugar de encuentro, aprendizaje y aliento del sentir de la comunidad de los gallegos y gallegas dentro y fuera del país.

Entre las novedades que introduce el texto, al que hoy se le da luz verde, está un posible traslado de restos o el enterramiento de nuevas personalidades en el mausoleo de San Domingos de Bonaval. Con todo, esto requerirá de un nuevo consenso entre las tres fuerzas políticas con representación para poder mantener este símbolo al margen de intereses partidistas. De este modo, se pretende blindar el significado de este mausoleo, en el que descansan los restos de los más ilustres de la historia de Galicia, como Rosalía de Castro o Alfonso Rodríguez Castelao, entre otros.

Para preservar el carácter institucional, la iniciativa predetermina en el artículo cuatro la composición del patronato de la Fundación, que deberá de estar integrado por un total de ocho miembros. Estos tendrán que representan a los poderes legislativo y ejecutivo de la comunidad, así como a los titulares demaniales y patrimoniales de los espacios que conformarán el Panteón de Galegas e Galegos Ilustres, todos ellos presididos por la persona titular de la Presidencia del Parlamento, que en este momento ocupa Miguel Santalices.