Medio millón de euros para reparar las marquesinas, puertas correderas y los estores de la Praza de Abastos

Reparación de las marquesinas, estores, puertas correderras, del cuarto de baño adaptado y nueva instalación eléctrica de la torre central. Son algunas de las actuaciones que contempla el proyecto de rehabilitación de la Praza de Abastos que el gobierno local aprobará mañana. Se trata de un plan de reforma que asciende a 518.710,53 euros, con IVA incluido, y que tiene por objetivo resolver algunas de las patologías más graves detectadas en el complejo. Tras la restauración llevada a cabo en 2014, “o edificio vén arrastrando unha serie de deficiencias” que se recogen en un informe técnico que propone una serie de intervenciones de carácter urgente.

En el proyecto que irá a la xunta de goberno se da solución a una parte de estos problemas. Como adelantó EL CORREO, algunos ya fueron resueltos por el servicio de mantenimiento del Mercado, y otros, los más urgentes, ya están solucionados. Ahora, una vez que se adjudique el contrato, se procederá a intervenir sobre los elementos pendientes.

Por un lado están las marquesinas de vidrio. Según los planos recogidos en el proyecto de 2006, existían tres tipos: las marquesinas ubicadas en la cabeza sur, de comunicación con el edificio de talleres; las centrales que comunican las naves; y las situadas sobre los puestos del muro.

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En lo que se refiere a estas últimas, la actuación pasa por eliminar las filtraciones y mejorar el mantenimiento del falso techo. Entre las actuaciones contempladas figuran darle una pendiente mínima de 1,5% al plano de vidrio de la cubierta, con una instalación de una nueva bajante por canalón, una nueva impermeabilización adherida o flotante sobre el canalón existente; y la instalación de un nuevo canalón a modo de freno para el agua recogida por la cubierta de teja. También se plantea un falso techo de reja en acero galvanizado, más fácil de desmontar y de más sencilla limpieza y mantenimiento.

Para los dos primeros tipos, se propone una intervención similar, manteniendo el conjunto, y mediante el relevo de los elementos que resuelvan las filtraciones de agua y el difícil mantenimiento del falso techo. De este modo, se mantiene el canalón existente pero se prevé su limpieza así como la revisión de sellados y uniones con la estructura metálica existente. El falso techo de vidrio, de difícil mantenimiento será sustituido por una malla permeable a la luz para tamizar su paso; un elemento ligero y resistente para su fácil desmonte y manipulación.

En cuanto a los estores verticales que protegen del sol los puestos localizados sobre el muro, en mal estado de conservación, se propone una nueva localización entre pilares, que facilite su mantenimiento, al ser piezas más pequeñas. Esta solución también permite que tengan menos peso visual desde la rúa Virxe da Cerca. Además, se dotarán de cajas para que estén resguardados de la intemperie y se motorizarán para que el recogido sea mucho más sencillo.

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También se actuará sobre las puertas correderas de las naves, de 3 metros de altura. Se instalarán nuevos motores para agilizar su apertura por la nueva localización del sensor de presencia, que se descolgará del dintel. Además, las puertas estarán proveídas de un marco perimetral de acero inoxidable mate, lo que protegerá los vidrios de los golpes en los bordes. Una de ellas ya se cambió, a través de un proyecto piloto, y ahora se van a cambiar el resto.

El cuarto de baño adaptado está instalado en el ámbito del edificio de los talleres y se ve afectado por continuos atascos. Para solucionarlo, se sustituirá la arqueta exterior por otra de mayor tamaño. En cuanto a la torre central donde se sitúan los servicios administrativos presenta una serie de deficiencias en la instalación eléctrica. Así, se realizará una instalación interior nueva conservando las luminarias, pero renovando el cuadro de cada planta y su cableado de distribución interior.

El tiempo estimado de las obras es de 26 semanas, en perjuicio “de posibles limitaciones a la disponibilidad física o temporal del ámbito de actuación que pudieran conllevar la necesidad de establecer fases de obra que supusieran en la práctica una ampliación del plazo inicialmente estimado”. Los trabajos están programados en horario de tarde.