"Estudié en Peleteiro pero no era el gracioso de la clase"

David Suárez (24 de abril, 1992, antiago) es un cómico compostelano que igual masca con gusto un cactus que te lo mete en la boca, lo que a veces hiere más de una sensibilidad. En abril de 2019, La Cadena Ser, donde colaboraba con Dani Mateo en YU (Los 40 Principales), le echó tras un tuit suyo sobre una chica con síndrome de Down, motivo de un posterior enredo que acabó cuando el Tribunal Superior de Madrid confirmó en 2022 su absolución. “No tenía intención de dañar a nadie”, dijo en su comunicado online, un mensaje que suma 3.000 respuestas.

Al acabar bachillerato en Santiago, David se fue a Madrid buscando vivir del show business, inspirado por la tribu de La Hora Chanante, el formato estrenado en 2002 en Paramount Comedy con Joaquín Reyes, Ernesto Sevilla, Raúl Cimas, Pablo Chiapella, Julián López, Carlos Areces...

Década y pico después de su marcha, David camina por el alambre de su humor. Y este jueves vuelve a Santiago con un espectáculo llamado con guasa Humor blanco (Auditorio Abanca; 20.30 h.; 15 euros) que el viernes va hasta A Coruña (Ágora).

_En su vídeo en redes sobre su viaje a Santiago no hay tan polémicos chistes como en el clip de Ciudad Real (“Ciudad Fecal”, dice) ¿hasta que punto es su modus operandi cuando va a actuar en cada lugar? ?

_De vez en cuando hago estas promos y el reclamo más interesante es hablar de la propia ciudad pero nunca hay una intención de generar polémica, sí de que se hable del vídeo… pero la intención no es enfadar a nadie. La idea es que el vídeo aparezca en tus redes sociales y que, en última instancia, acabes comprando una entrada. A mí me sigue sorprendiendo que, efectivamente, siga habiendo mucha gente que se ofende y enfada y deja un comentario para hacerte saber lo fatal que le ha parecido que se metan con su ciudad. Entonces, te das cuenta de que hay tabúes que tienen mucho que ver con el sitio del que es uno.

“El debate sobre los límites del humor es una involución social”

_¿Ya le gustaba el humor de niño?

_Hacía teatro de pequeño en las actuaciones de parvulitos en Navidad y poco más. Tampoco era el gracioso de clase, ni mucho menos, si era un poco el que hacía reír al de al lado, y el otro se reía, y al que acababan echando de clase por reírse era a mi compañero, pero nunca era el revoltoso. De hecho, era la rata asquerosa que hacía el chiste y luego me callaba y fingía que no había hecho nada. No es que sacase unas notas increíbles pero no era mal alumno. Estudié en Peleteiro.

_¿Qué referentes tuvo al inicio?

_Las primeras cosas que me llegaron cuando era pequeño eran Cruz y Raya, Muchachada Nui... Luego, en la adolescencia es cuando descubro la comedia más anglosajona, que quizá es la que más me ha influido pero hago un mix de todo eso. Al final, creo que todos citamos a la misma gente porque, en música no es lo mismo, pero en comedia hay gente que está a años luz del resto y son quienes nos influyen a todos, y son: Rick Gervais, Dave Chappelle, Bill Burr, Jimmy Carr, Anthony Jeselnik, Parker...

_En su generación, internet parece suplir el circuito de bares que ofrecía el debut monologuista.

_Yo he tenido la suerte o la mala suerte, según se vea, de saltarme los bares pequeños, porque saqué una serie (en Youtube) hace once años y funcionó bastante guay y tuve una audiencia lo bastante grande, sin ser gigante, como para empezar actuando ante 50 personas, que eran personas que te querían ver. Y tuve esa suerte, o esa mala suerte, según se vea, porque también te acostumbras muy mal ante un público que ya espera reírse de determinadas cosas, y no tienes que pasar por esa fase que tiene que hacer todo cómico de autoexplicarse, contextualizar y explicar quien es y dejar de ser extraño en un minuto y, de repente, ser alguien a quien tienes que escuchar y que tiene cierto interés. Internet es un avance en eso, si bien es verdad que antes Paramount tenía un abanico mucho más amplio y, quizá por falta de cantera, podía entrar mucha gente a probar suerte, monologuistas de todo tipo, y gracias a eso conocemos a Ernesto Sevilla, Joaquín Reyes... pero Paramount ha cerrado esa puerta, de repente, o quizá debido a que Internet ha acaparado eso, y al no existir esa vía hace falta otra donde se reconduzca el talento o los intentos de... y ahí internet funciona como una democracia bastante interesante, cada uno va a probar suerte, no hay más filtros.

“En el humor de hoy hay más autocensura que censura”

_Su biografía profesional tiene un punto y aparte: la sonada broma del tuit de 2019.

_Es algo que iba a acabar pasando de un modo u otro, y al final ha tenido sus consecuencias negativas, como no poder trabajar con marcas, desaparecer por completo de cualquier tipo de plataforma y de llegar al mainstream por vías más directas, pero tiene también cosas buenas, que pesan más que las malas, como son que me hayan contextualizado, por fin: ‘El tío que ha tomado ese camino’. Te puede gustar o no pero ya sabes a lo que vas. Por otro lado, me ha dado cierto reconocimiento, el cual he explotado sin ningún tipo de remordimiento... La poca fama que tengo, tanto negativa como positiva, me la han dado las polémicas. Yo sigo confiando en lo que hago. No porque haya mucha gente enfadada esa gente va a tener razón. Tengo la conciencia tranquila, acepto la situación, que es lógica y entendible: tú dices cosas que pueden crear polémica y esas polémicas te pueden levar a sitios que no siempre son los más cómodos.

_¿Qué busca su actual show?

_Intentar que te rías de cosas de las que no esperabas reírte y encontrarte a ti mismo en sitios a donde no esperabas ir. Esa es la comedia que a mí me gusta.