Santiago

El sector biotecnológico de Santiago busca proyectarse en el exterior para desarrollar todo su potencial

El plan de promoción internacional de la Cámara de Comercio realiza una apuesta estratégica por este campo

El objetivo es captar inversiones para los proyectos generados y dar a conocer los productos

Una persona trabaja en el laboratorio del Cimus, uno de los centros de investigación de la USC relacionados con la biotecnología

Una persona trabaja en el laboratorio del Cimus, uno de los centros de investigación de la USC relacionados con la biotecnología / Jesús Prieto

La hoja de ruta trazada por la Cámara de Comercio de Santiago para la promoción internacional en los próximos meses pondrá el acento especialmente en el sector biotecnológico. La entidad desarrollará acciones en cuatro continentes consistentes en exposiciones y visitas a ferias internacionales, misiones comerciales y participación en congresos en el marco del plan de fomento de las exportaciones, promovido por el Igape y cofinanciado por la UE. Las empresas biotecnológicas tendrán un peso especial en las actividades previstas con el objetivo de captar inversiones para los proyectos generados y dar a conocer sus productos.

Según explica el responsable del departamento de internacionalización de la Cámara, Fernando Pérez, la apuesta por el sector biotecnológico es “estratégica”. Así, enumera que Santiago dispone de los centros de trabajo, del personal y el conocimiento generado en su universidad y de “un campo de pruebas fantástico” en los hospitales.

A principios de 2023 se contabilizaban medio centenar de entidades con una facturación conjunta de 65 millones de euros y 350 personas empleadas. Por todo ello, “Santiago es una potencia en este campo y tiene capacidades para aumentar su influencia porque el producto y la capacidad técnica está demostrada. Ahora hay que sacarlo al exterior, hay que darlo a conocer”, indica Pérez.

El responsable de internacionalización remarca que este campo está en continuo crecimiento, especialmente a raíz de la pandemia, “donde se visibilizó mucho más la importancia estratégica de estar en las primeras líneas de investigación, no solo de vacunas, sino de todo tipo de fármacos”. Así, añade que “la biotecnología también tiene una importancia muy relevante en el campo de la nueva alimentación y el valor añadido que soporta es fundamental para nosotros y para la promoción internacional”.

Poca capacidad financiera

El potencial de las empresas biotecnológicas de la capital gallega se encuentra con el problema de que “a pesar de tener muy buen producto y muy buenos técnicos, las capacidades financieras son pequeñas”, señala Pérez. “Las empresas son pequeñas y un producto necesita unos años de investigación para que se haga realidad. Conseguir la financiación suficiente para generar ese producto una vez terminado no es fácil cuando las espaldas financieras de las empresas son estrechas” subraya.

Por ello, la entidad cameral tiene claro que una de las maneras de ampliar esta capacidad es buscar la financiación en el exterior. Pérez describe que “nosotros trabajamos primero en asesorar. Hay que tener en cuenta que estos técnicos que están en el ámbito biotecnológico no tienen por qué saber de comercio exterior, de contratación internacional, de homologaciones de productos, de cuáles son las ferias más relevantes o dónde se pueden encontrar los mejores y más grandes financiadores para este tipo de producto. Y ese es nuestro trabajo, localizar esos foros y facilitarles al máximo que lleguen allí con toda la logística y toda la información necesaria preparada”.

Acciones previstas

Dentro de esta estrategia, América y Europa serán los principales destinos, sin perder de vista otros mercados en Asia, Oriente Próximo o África. Además del campo de la biotecnología, la entidad compostelana realizará una apuesta por la promoción del sector contract. La Cámara ha organizado en el continente americano misiones empresariales en Carolina del Norte (Estados Unidos) para el sector biotech. Además, viajarán a Ecuador, Perú, Chile, Colombia y a una misión sectorial para farma y aeronaútica en México. También se acudirá a la Feria Bio International Convention en San Diego (Estados Unidos) y a la Feria Expopesca de Manta (Ecuador).

En Europa se acercarán a los mercados de Suiza (Swiss Biotech day y Vita foods Europe); Bretaña (Francia) para el sector biotech; Grecia, Chipre y Turquía. También en Europa se organizará la participación en eventos como la Feria CPHI de Milán (Italia), la Bio Europe de Suecia (Estocolmo) y la Food Ingredients Europe de Franckfurt (Alemania).

Los mercados asiáticos también serán otro de los objetivos de la agenda internacional de la Cámara para este año con destinos como Singapur y Malasia, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí (para el sector contract). Se prevé la participación también en la Feria Big Five de Dubai. En las regiones de África se programaron misiones comerciales para expandirse en los mercados de Egipto en noviembre y la participación en el Salón Halieutis de Marruecos en 2025, referente al sector pesquero.

Urovesa, un caso de éxito

A través de estas misiones comerciales y de las asistencia a ferias internacionales, hay ejemplos de casos de éxito de empresas de Santiago que empezaron a exportar más o que no disponían de esa capacidad de actuación en el exterior. Pérez cita el caso de Urovesa, que “a nivel internacional empezó con la Cámara”.

Así, destaca que la marca de vehículos especiales, tras dar sus primeros pasos hacia el exterior con este programa, “cada vez se fue afianzando más su capacidad de internacionalización, montó un departamento específico, fue incrementando productos y mercados, y llega un momento en que la empresa vuela sola”.

Para Pérez este caso ejemplifica la idea del plan de promoción internacional, que resume en “facilitar a las empresas los primeros pasos hasta que se estabiliza la exportación. Luego, los fondos hay que centrarlos en aquellos que se están iniciando”. 

Las empresas más grandes son las que más exportan

Las empresas de Santiago y su área de influencia de mayor tamaño son también las que más facturan en concepto de exportaciones. Aunque no existe una base de datos específica con las cifras de cada sociedad individualmente, Pérez apunta que Finsa, Urovesa, Jealsa, Rianxeira, Frinsa, el grupo de Aluminios Cortizo o Feiraco son líderes también en su proyección internacional. Así, señala que “la exportación exige unas espaldas y una capacidad financiera importantes. Entonces, por cierta lógica, las grandes van a ser las mayores exportadoras”. Además, cree que “las empresas de Santiago están bien situadas. Podemos presumir de tener ahí 10 o 12 empresas de primerísimo nivel exportador y en factuación”.

Pérez también considera que se debe tener en cuenta que “no hay que pensar en la internacionalización solo como vender fuera”. Por ejemplo, localizar a los mejores proveedores al mejor precio va a reportar luego un valor añadido increíble”. Por ello, “la internacionalización ahora hay que valorarla en todos sus aspectos”.

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