ATROPELLO MORTAL EN SANTIAGO

Iván Méndez condujo tras el atropello hasta su casa familiar, donde decomisaron el coche

Sus padres declararon que llegó al domicilio al volante del Mercedes A200 

El joven y su novia aseguraron a la Policía que era él quien manejaba el vehículo en la rúa da Poza Real

Los análisis de sangre esclarecerán si la pareja se encontraba bajo los efectos de algún tipo de sustancia

Momento en el que el coche policial que traslada a Iván Méndez sale del juzgado con dirección a la cárcel de Teixeiro

Momento en el que el coche policial que traslada a Iván Méndez sale del juzgado con dirección a la cárcel de Teixeiro / David Suárez

Tanto Iván Méndez Fernández como su novia, Débora Gómez Chouza, se acogieron a su derecho a no prestar declaración en la Comisaría del CuerpoNacional de Policía en Santiago tras ser detenidos como los presuntos responsables del atropello mortal de Jorge Santiago Salgado la madrugada del martes 3 de octubre en la rúa da PozaReal de Arriba, en el barrio de Conxo. 

Sin embargo, fuentes policiales indican que ambos sí quisieron dejar claro desde el principio un detalle sobre lo que había ocurrido: que era él quien conducía el Mercedes A200 en el momento que se produjo el atropello. Las mismas fuentes admiten que en un primer momento llegaron a generarse dudas sobre el grado de responsabilidad que tenía cada uno de los detenidos en los trágicos hechos.Finalmente, se concluyó, como así lo determinó también la titular del Juzgado de Instrucción número uno de Santiago, Ana López-Suevos, que Iván Méndez era el que supuestamente conducía cuando su vehículo arrolló a Jorge Santiago, desplazando su cuerpo varios metros hasta un zarzal junto a la acera situada frente a su casa.

Todo apunta a que después de producirse los hechos Iván Méndez condujo el Mercedes Benz con la puerta izquierda delantera completamente destrozada —posiblemente debido al impacto que sufrió contra la grúa que estaba estacionada en el mismo margen de la calle donde se encontraba Jorge Santiago— hasta la casa de sus padres, en el vecino municipio de Teo. Los progenitores del acusado declararon posteriormente en Comisaría que cuando el sospechoso llegó al domicilio lo hizo al volante del Mercedes A220, que está a nombre de su madre, mientras que Débora ocupaba el asiento del copiloto, aunque esto “no quiere decir que no se pudieran intercambiar” de camino, puesto que todavía se está investigando qué ocurrió en el trayecto entre la rúa da Poza Real de Arriba y la casa familiar.

En el domicilio fue donde, poco después de la llamada de Iván Méndez al cuartel de la Guardia Civil de O Milladoiro para contar lo que había pasado, fue decomisado por la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía el coche deportivo con el se produjo el atropello de Santiago Salgado. Este vehículo fue inmediatamente trasladado a un taller de la capital gallega donde agentes especializados realizaron una inspección de los neumáticos, frenos y otros elementos del chasis y el motor. 

Algunos testigos aseguran haber visto a los padres de Iván Méndez en el lugar del suceso tras conocerse lo ocurrido, aunque esta información no ha podido ser contrastada por fuentes policiales.Sin embargo, sí consta que los progenitores del acusado se desplazaron a la Comisaría de la Policía Nacional de Santiago a prestar declaración tras los hechos. Al parecer, su padre no solo manifestó que Iván Méndez conducía el coche cuando llegó a casa, sino que también aseguró que una de las grúas de su empresa estaba sufriendo pinchazos en las ruedas desde hacía algún tiempo en la calle donde se produjo el atropello que acabó con la vida de Jorge Santiago.El problema de los pinchazos que sufría la grúa que cada noche un empleado de la compañía estacionada en este punto fue también reseñado por otras tres personas en sede policial: el propio acusado, el trabajador de la compañía de su padre, una de las primeras personas que auxilió a la víctima tras hallarse su cuerpo sin vida; y otro vecino que tenía constancia de estos daños en el vehículo. 

Por otro lado, los investigadores están a la espera de conocer los resultados finales de las pruebas toxicológicas que se les practicaron a los dos detenidos. Aunque se cree que en el momento del suceso ni Iván Méndez ni Débora Chouza se encontraban bajo los efectos de ninguna sustancia, la Policía Judicial ordenó la realización de una completa analítica de sangre para esclarecer si habían consumido algún tipo de droga antes del atropello mortal. 

La familia de Iván Méndez, para quien la jueza decretó prisión provisional sin fianza, ha contratado a un conocido abogado penalista compostelano para ejercer la defensa. Se trata de Pedro Trepat, quien representó a Nunca máis en el juicio por la catástrofe del Prestige. Mientras que la familia de la víctima también ha dado un paso al frente.Este diario ha podido saber que la viuda de Jorge Santiago Salgado ha contactado también esta semana con el conocido letrado penalista y exdecano delColegio de Abogados Evaristo Nogueira, quien se personará en el caso ejerciendo la acusación particular.

Iván Méndez, un joven de 30 años y vecino de Teo, ha pasado sus tres primeras noches en la cárcel de Teixeiro, después de que la jueza haya decretado para él prisión provisional como principal sospechoso del atropello mortal de Jorge Santiago. Su pareja, Débora Gómez, de 27 años y natural de Ribeira, ha quedado en libertad con cargos con la obligación de comparecer cada 15 días en sede judicial.La magistrada que lleva el caso todavía no tiene claro el delito que se le imputa a ambos, lo cual se aclarará durante la instrucción: la duda está en si se le imputa homicidio doloso o directamente asesinato. 

Para la defensa es de suma importancia que se clarifique el tipo de delito que se les atribuye a ambos acusados, puesto que las penas también varían en el Código Penal: en el caso de asesinato podrían enfrentarse a entre 15 y 25 años de prisión; mientras que si se tipifica como homicidio la condena se reduciría a entre 10 y 15