La aprobación de la Lei do Xogo pone contra las cuerdas al nuevo casino en Santiago

El Pleno del Parlamento de Galicia aprobó este martes la nueva Lei do Xogo, que promueve un juego seguro y protege del riesgo de adicción a las personas más vulnerables, como son los menores, así como a aquellos que sufran algún tipo de ludopatía o adicción al juego. La viceportavoz popular Paula Prado, destacó que esta nueva ley busca adaptar la legislación existente del año 1985 a la realidad actual, con el 'boom' de las apuestas deportivas o casinos online. Algunas claves de la nueva normativa son la prohibición de instalar máquinas de apuestas en recintos deportivos y ferias, el veto de todo tipo de publicidad de los juegos en la radio y la televisión de Galicia o la ampliación de la distancia mínima de 150 a 300 metros radiales con respecto a instituciones educativas y centros de rehabilitación.

Y es este último punto el que, como ya publicaba EL CORREO GALLEGO la semana pasada, deja en el aire la idoniedad de la localización del nuevo casino que el grupo Comar quiere abrir en lo bajos del Hotel Araguaney en Santiago.

Los centros docentes más cercanos a esta ubicación son el IES Rosalía de Castro, situado en las inmediaciones de la Alameda compostelana, y la Escola Infantil Rubido Romero, emplazada en la rúa República Argentina. Especialmente en el caso del primer centro el cumplimiento de una distancia radial de 300 metros no se cumpliría.

La aplicación Google Maps arroja una medición entre el Instituto Rosalía y el Hotel Araguaney de unos 250 metros aproximadamente, una distancia que pondría el proyecto de Comar contra las cuerdas por la imposibilidad legal de que el casino aterrize en el hotel compostelano.

El nuevo Gobierno local aún no ha marcado posiciones con respecto a la posible apertura de un casino en la capital gallega. A preguntas de este diario, fuentes de Raxoi señalan que toda la información de la que disponen al respecto es la proporcionada durante los últimos meses por EL CORREO GALLEGO.

Según pudo saber este diario, el local que en otro momento albergó la discoteca Cásting se encuentra en este momento completamente desmontado y adaptado para el emplazamiento de los distintos dispositivos de juego. Además, el grupo Comar continúa con un contrato de alquiler en vigor de un local del que ya es arrendatario desde el mes de febrero.